Si ha tenido la sensación de que al entrar a una barbería ha vuelto varios años en el tiempo, es gracias al estilo del sillón barbero, dado que es común que estos muebles posean un diseño muy particular parecido a las características que se manejaban en décadas anteriores; por entonces, lucir un corte de peinado y un vello facial bien cuidados era un símbolo de distinción, y por eso quienes asistían allí tenían el lujo de sentarse en un asiento cómodo, similar al de un rey.
A pesar de que ya han pasado más de cincuenta años de que esta época dejó de tener tanta presencia, aún es común que se sigan empleando muebles de barbería bajo esta misma línea de diseño, ¿acaso es que la creatividad de los fabricantes se ha agotado y ya no existen estilos que rompan el paradigma? Todo lo contrario, la razón es que el retro ha tenido tanto éxito que ver un establecimiento sin este tipo de sillones resulta tan extraño que rara vez llama la atención de los clientes.
No es porque el diseño haya sido muy bonito o sea una línea estándar que todos los locales deben cumplir obligatoriamente, el motivo por el que nunca pase de moda unas sillas de barbería retro es que no sólo representan comodidad, sino que se encargan de vender una experiencia, que es en última instancia lo que buscan reflejar.
¿A qué se refiere con «experiencia»?
Una barbería, como su nombre indica, está dedicada al cuidado de las personas que tienen barba; en la época en la que surgió este modelo de negocio, la estética del cuerpo estaba limitado a las peluquerías de las mujeres. Cuando apareció el primer establecimiento, la comunidad pensaba que se trataba de un salón de belleza y los hombres no podían acceder sin ser juzgados.
Para destacar de los establecimientos femeninos, fue necesario impactar desde la vista y decirle a la clientela masculina: «este es su espacio de confort», para ello, emplearon la diferenciación con el diseño; las peluquerías tienen colores más vivos, muebles con terminaciones redondas y adaptadas a la anatomía femenina, estantes dedicados a almacenar productos como esmalte o maquillaje, entre otros. En cambio, una barbería tiene tonalidades más sombrías, accesorios especiales al cuidado de los hombres y asientos no tradicionales.
Esa experiencia nueva de diseño les da a los hombres un pequeño rincón en el que ser ellos, cuidar su estética y obtener resultados con los que impresionar a la sociedad; todo desde la comodidad de un asiento confortable y que evoca lo mejor de la elegancia y el goce de la vanidad masculina.
¿Cómo es el sillón retro?
¿Qué tiene de especial un simple asiento y por qué no ha pasado de moda? Todo va en la ideología de su diseño; el sillón barbero se caracteriza por ser más alto y ancho, perfecto para sentar al prospecto de hombre grande y fuerte; además no posee acabados delicados, sino que su contextura en cuero y estética robusto marca la valentía y agresividad del género masculino; así mismo, cuenta con un piecero cómodo en el que reposar su peso y simplemente disfrutar de un buen corte.
En su mayoría posee colores marrones que combinan con la estética de las barberías, la cual se caracteriza por incluir tonalidades similares mezcladas con el brillo y elegancia del acero inoxidable, que permite destacar un mecanismo que recuerda al motor de un coche.
La conjunción de esos pequeños detalles ocasiona que al mirar por primera vez el mostrador de la barbería, ya parezca un lugar cómodo en el que pasar algunas horas, perfilando el corte de su cabello, arreglando su barba, protegiendo el vello o simplemente haciendo un recorte de rutina mientras comparte sus experiencias recientes con el dependiente del local. Son esos imaginarios de confort que produce la silla los que hacen que la clientela prefiera una barbería con un sillón barbero retro que uno muy innovador pero poco conocido.
Entonces, ¿necesita un sillón retro para su barbería?
Si recién está comenzando su barbería y desea tener una marca concebida le recomendamos que adquiera un sillón barbero retro, pues el imaginario popular lo hará destacar de su competencia local, consiguiendo que el número de clientes potenciales aumente y por ende su negocio evolucione. Además, este tipo de asientos vienen incluidos con los más altos estándares de calidad y las funciones más útiles para ofrecer un servicio ideal.
Tienen la capacidad de cambiar la altura en función del cliente que se siente, girarse sobre su propio eje para obtener el mejor ángulo e inclinarse para ofrecer la experiencia de relajación y calidad que esperan las personas al ver el estilo de los muebles del local.
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